¿Aprender de la competencia?
Analizar al otro y a nosotros mismos para tomar mejores decisiones en el mundo empresarial.
La competencia siempre será sana. Sabemos que el mundo de los negocios es cambiante, dinámico y acelerado, por ello, más allá de estar abiertos al cambio, la sugerencia que hacemos es apostar por la adaptación a las nuevas tendencias y formas de llegar al cliente de interés.
En esa dinámica, existen diferentes técnicas que ligadas a la mercadotecnia permiten obtener información. ¿Para qué? Pues bien, algo muy importante, para tomar mejores decisiones, desarrollar estrategias y por supuesto, aplicarlas como impulso del modelo de negocios que se tenga dentro de la industria de la moda.
Una de ellas lleva por nombre Benchmarking. Ésta consiste principalmente en observar a otras empresas o perfiles claves e importantes dentro del sector en el que nos desarrollemos.
Esa observación debe complementarse con un análisis y claro, evaluación de procesos, servicios, prácticas, mensajes, estándares, respuestas y más de dichos competidores. En otras palabras, no sólo mirar, sino actuar en función de la información que se obtiene.
Por ejemplo, si estás a punto de lanzar una nueva colección, producto o servicio. Tu objetivo, al realizar el Benchmarking, será determinar cuáles son las estrategias que aplican tus competidores cuando tienen la misma intención que tú, el lanzamiento en cuestión.
Con lo anterior, ten en cuenta que no se trata de imitar o copiar. Por el contrario, identificar los valores y virtudes de los otros, para reafirmar desde un estudio comparativo qué puedes mejorar o diferenciar para tu propia estrategia. Es decir, bajo ninguna circunstancia debes perder tu identidad; con el Benchmarking te sugerimos encaminar tus decisiones bajo la consigna de mejora e innovación.
Pregúntate, qué objetivo tengo, cuál es la razón de mirar a otros, qué los hace únicos, qué pueden mejorar y qué podrías hacer aún mejor para tus propios proyectos.
Una comparación con sentido para seguir creciendo y ofrecer valores diferenciadores a los consumidores. ¡A trabajar!